Comiéndole la polla a su hijastra transexual
- 28410
- 29:43
- 72

Se conocieron en el gimnasio y desde el primer día se dieron cuenta de que estaban hechos el uno para el otro, ambos compartían la afición por el deporte, tenían una gran sexualidad y les unía una razón con peso: la polla. Este chico nunca pensó que terminaría siendo el novio de una transexual, ni tan siquiera se masturbó pensando en chicas del tercer sexo pero el destino es caprichoso y que le pregunten si está contento o no con la zorrita que se está tirando, la respuesta será evidente. No es de extrañar que todas las arpías del gimnasio no le dirijan la palabra a esta tranny, van todos los tios locos detrás de ella para echarle un polvo.